Cuando se acerca una celebración importante (Cumpleaños, San Valentín, Navidades, Día de la Madre, etc.) es el momento adecuado para ofrecer bonos regalo en tu spa. Pero no el único, ya que durante el resto del año muchos clientes también celebran sus cumpleaños, aniversarios de boda o simplemente desean hacer una escapada y disfrutar de un masaje o de unas horas de relax en el spa.
Normalmente, con estos bonos pueden regalarse servicios como:
- Masajes.
- Rituales en pareja.
- Actividades deportivas.
- Tratamientos de belleza, relax y salud.
- Packs completos.
- Circuito de spa.
Cómo ofrecer bonos regalo en tu spa
Es siempre conveniente que los spas dispongan de un sistema que permita la venta de los bonos regalo tanto en el propio establecimiento como a través de internet. En el segundo caso, esto puede hacerse añadiendo un simple botón de «Regalar» y un formulario que permita personalizar el bono con el nombre de la persona que va a recibir el regalo.
¿Por qué no se canjean los bonos regalo?
La gran paradoja de los bonos regalo es que un gran porcentaje de ellos jamás llegan a canjearse. Esto puede deberse a que quizás la persona que los recibe no está interesada en ese regalo, a que se olvidó de canjearlo o simplemente a que se terminó el plazo en el que podía utilizarlo.
El caso es que esto supone una gran ventaja para el spa, porque el cliente ha pagado por ese servicio pero en ningún caso ha supuesto un coste para el negocio. Así, ningún profesional ha tenido que realizar el trabajo ni tampoco se han utilizado las instalaciones del spa.
Por este motivo, te recomendamos que ofrezcas bonos regalo, porque tanto si el cliente llega a canjearlos como si no, el spa siempre saldrá beneficiado. Eso sí, recuerda que es importante indicar en las condiciones de compra que es posible pedir cita en el horario que más le convenga o que pueden cambiarse por otros que se adecúen mejor a sus necesidades.